Cada noche después del último zazen del día el Ino recita esta estrofa mientras los practicantes siguen sentados en meditación. La comparto a petición de un practicante en la última sesshin que he dirigido en el Monasterio Luz Serena.
«Oídme pacticantes del Dharma.
La vida y la muerte es el asunto esencial.
El tiempo pasa rápido como una flecha.
A vosotros que buscáis la Vía
Huildemente os digo:
Tomad conciencia del instante presente.»